Esa forma tan particular que tienes tú
Como no quererte
si desde el primer día
en que se cruzaron nuestras vidas
te atrincheraste en mis sueños,
te encerraste en mi alma
y te apoderaste de mi mente.
Con ese agradable trato
que tienes tú
y con esa suavidad
que revela tu personalidad
con la que curaste todas mis heridas
que sangraron durante siglos.
Con ese carisma
y esa forma tan particular
que tienes tu
me enseñaste a querer al mundo
salvandola de su destrucción
y arrojando todo lo malo
que había en mi.
Me dijiste que me querías
que me adorabas
y que me querías mucho,
desde ese día todo
cambió en el mundo.
Hoy veo al mundo de otro modo
y ahora quiero a todo el mundo,
quiero que brille el Sol Para todos
y que nadie tenga motivos para sufrir.
Al caminar por las calles
la gente me mira
cuando de pronto sonrío ...
al recordar algo de ti.
O son tus palabras
los que regresan a mi mente
por algo gracioso
que tú siempre comentabas.
Es lo más grandioso
que me tocó conocer
y quisiera que nunca tengas un pesar,
que todo sea bondad para ti,
que los días te sonrían
y que Dios bendiga tu andar.