Alfonsina, la sirena que retornó al mar
A Alfonsina Storni:
En su retorno al lugar del que emergió.
Te fuiste con tu tristeza,
acompañada con tus penas
y la soledad que tanto apreciabas
Te fuiste con las alas plateadas
y vestida con los versos cantados
por la voz antigua que te requería y te perseguía.
Te fuiste arrastrando los recuerdos del alma,
ocultando la mirada de la Luna
que se refleja en las oscuras
y nostálgicas aguas marinas.
Abrumada con los sueños de angustia,
que son los requiebros que lanzaste al mar
los que adormecían tus sueños
y resquebraja tu alma dormida,
Eran las sombras que mueren al anochecer
después de lanzar una oración sincera
pidiendo al cielo el consuelo que no llegaba
que todos obviaban y que nadie quería escuchar.
Eran los aromas místicos y envolventes
que invaden los recuerdos ingratos y obsesivos
de los sueños perturbados y adormecidos.
Eran las fragancias que vagan solas
por estas tierras desiertas de la memoria
selectiva y a veces envolvente y extraña,
que inducen a los sueños recurrentes
y los convierten en pesadillas angustiosas.
Son los silencios del mar que reclaman
a los seres profundos y apasionados
con sus lamentos omnibulentes y ofuscados
que turban y perturban a las mentes místicas
reclamando el pronto retorno al mar,
voces que se escuchaban y te reclamaban.
que retumbaban tu mente, es el llamado del mar
del que nadie se puede negar a obedecer.
Tus poemas, sirena de tierra eran el clamor del mar
exigiendo tu retorno y cuando se venció el plazo
te entregaste a los brazos del mar que exigía
tu regreso obligado, por que tu eras sirena del mar
y las aguas te reclamaba cuando el plazo ya había vencido,
Junto con tus letras, versos, rimas y poemas,
ahora lanzas un nuevo canto entre las olas cantarinas
canto que surge de entre las aguas que bañan a la sirena
que retornó al mar y que hoy les cantas los versos
de tus odas a las olas marinas y a las sensuales
y místicas sirenas que arrullaran tus versos,
a los navegantes en el alta mar acompañadas
de los inteligentes delfines y adornaran tus poemas
con corales de mil colores y las medusas se multiplicaran
con las sirenas homéricas y con los diligentes caballitos de mar,
y adornaran tus cabellos con las estrellas de los arrecifes
del mar coralino y en el fondo te aplaudirán
mil pecesillos de mil colores y te nombraron reina del mar
y Tetis la madre de Aquiles y antigua reina del mar
acompañada de la Nereidas, antiguas ninfas marinas
te rendirán pleitesía.
Antonio Encinas Carranza
De: Lima, Perú
D. R.