Poeta frustrado
No critico tu obra
solo criticó tu critica.
La critica de un poeta
que solo pudo publicar una obra.
Se dejó crecer el cabello
y se compró un laúd
lo único que le faltaba
fueron alas para volar al paraíso
y una musa a su costado.
Lo aplaudieron
y pudo firmar sus libros
en la venta de una feria callejera
donde se pasó la tarde
y solo firmó el libro
que compró su mamá.
Se volvió soberbio
y miró por encima de los hombros
y criticó a los jóvenes noveles,
principiantes y entusiastas
amantes de la poesía.
Los denostó, insultó, ofendió
con diatribas y palabras injuriosas,
como de que escriben:
versos sin vida,
sus letras se diluyen,
junta letras les dicen,
poetas de mampostería.
Antonio Encinas Carranza